2, 3 y 4 de octubre: como no olvidar jamás esos días.

Un primer apunte para l@s serie-adictos: ¿habeís visto ese capitulo de Sexo en NY en el que Carry engaña a Eidan por primera vez con Mr. Big, cuando al día siguiente, de repente, le llegan a la memoria flashes casi reales de lo que ha pasado?

Esa ha sido exactamente mi mañana: lunes, tras dos días, y una noche, muy intensos, los recuerdos también lo están siendo.

Tengo muchas, muchas cosas que contaros; el problema es el como. Unos me decían que a través de metáforas, para que cada lector interprete a su gusto; otros que buscase un hilo conductor que uniera todo lo sucedido; e incluso algunos me decían que ni se me ocurriera contarlo...

Pues bien: si tuviera que elegir una metáfora diría que este fin de semana ha sido una terapia de choque.
Si buscase el hilo conductor de todo (cosa que ya es un poco más difícil) diría que transgresión, cambio, buen rollo, ilusión, optimismo, futuro...
Y respecto al que me dijo que no lo contara... lo siento pero no tienes nada de que avergonzarte.

Con todos esos elementos que acabo de presentar os podeís imaginar que el viernes noche, sabado completo y domingo dieron para mucho y para muchos.

El viernes comenzó con muchos nervios, os parecerá una pijada pero era así. Teníamos que recoger a un buen amigo en el aeropuerto a última hora de la tarde y con esa idea, la verdad, el día se pasó volando.

Pero por fin ese colega llegó, se instaló y comenzamos nuestra primera noche de juerga. Corta para mi por mis responsabilidades como conductora pero igualmente buena.

El sábado, queridos lectores, ay el sábado, comenzó a las 12 de la mañana y no terminó hasta las 6 y media de la mañana del domingo, si se puede decir que acabara, porque dudo haber dormido algo entre las 6 y media y las 10 de la mañana del domingo.

El plan era a primera vista sencillo: merendero, comida, bebida, cumple de dos personas...

Resultado: sitio encantador, unos anfitriones perfectos y, aun a riesgo de repetirme, mucha bebida!

El día fue perfecto risas, historietas de aquel misterioso friki del post anterior... incluso discusiones y reflexiones sobre Derecho, vamos de todo!

Tan genial era el sitio y la compañía que estuvimos alli hasta la noche, hasta que la luna llena apareció. Muchos fueron los que dijeron que en una noche con luna llena puede pasar de todo, y.... que razón tenían.

Esa luna me deparaba a mi muchas sorpresas, increible pensar que momentos antes estuviese pensando en marcharme a casa a dormir(la)...

¿Recordaís que os decía que si buscase una metáfora esa sería terapia de choque? Pues lo digo por la sencilla razón de que todo lo que me pasó el sabado fue una prueba para mi. Por mucho que el alcohol me desinhiba todo lo que hice esa noche no lo hubiera hecho la Bea de hace unos meses (ni sin mi mejor apoyo en Gijón y donde quiera que este a mi lado).

Pero señores y señoras: no me arrepiento de nada!! ni de la tremenda resaca del domingo, porque no os imaginais lo llevadera que se hace cuando se acompaña (te acompañan), como decirlo,... de muchos... mimos! :)

Se que se me quedan muchas cosas en el tintero pero es imposible describir tantas emociones con palabras y también me es imposible pintar o escribir todos los sentimientos, imágenes, situaciones que me ha dejado este finde, porque han sido... algunos... indescriptibles.

Besos!
Bea.

p.s.: No he dado nombres, pero se seguro que cada uno que lo lea se identificará en uno u otro párrafo porque irremediablemente todos estabais ahi, y no dejeís de estarlo, por favor.